La Ley de Costas, promulgada en 1988, se presenta como antídoto o cura para poder proteger y preservar esas preciadas zonas, como lo son las costas, de todo el uso urbanístico, industrial, turístico.., que se está haciendo de ellas y que las tiene tan perjudicadas y asoladas.
Lo que esta medida pretende, en esencia, es la de mejorar estos escenarios naturales, de manera que presenten perspectivas de futuro, que se conserven sus recursos, que se haga un uso racional de ellos, que se protejan sus valores naturales y que se garantice su disfrute por parte de todos. El modo defendido por esta ley para conseguir inmunizar estas zonas es el de aplicar unos denominados deslindes, los cuales delimitan los espacios que pasarían a considerarse de dominio público-marítimo, es decir, de la administración del Estado.
Pero el hecho de llevar a la práctica esta ley, trae consigo la siguiente situación:
Por un lado, se encuentran miles de familias, que perjudicadas por ésta han visto derribadas sus residencias en segundos. Se han destruido sus vivencias y recuerdos y lo más importante, claro está, sus hogares.
Se les deja, literalmente, en la calle, ya que en la mayoría de los casos, no se les proporciona indemnización alguna.
Además, el hecho de que también se estén cerrando locales que no se ajustan a las medidas impuestas por esta ley, está provocando la disminución de puestos de trabajo.
Pero en la otra cara de la moneda encontramos una situación diferente. Una situación que demuestra una vez más como los mandamases manejan las cosas a su antojo y como la “plebe” tenemos que padecer sus decisiones.
Me refiero a que esta ley tiene excepciones, ya que localizaciones como Marina D´OR y el hotel Vela de Barcelona, se saltan las pautas que dicta esta norma, pero parece ser que no se van a tomar medidas al respecto.
Y por supuesto no olvidar Villa PSOE, el famoso sitio donde veranean nuestros más preciados políticos. Este también se encuentra en una zona que no se entendería como legal, pero claro pertenece al gobierno.
Miles de personas se quedan sin casas, pero ellos no se quedarán sin vacaciones.
En este video se retrata la idea de lo que esta perjudicando la ley de costas, además, el sitio que muestran nos debe resultar muy familiar:
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